El martes de esta semana solo se anotaron volúmenes marginales en productos industriales, con 3.150 toneladas de aceite de soja, 103 de girasol, 160 de aceite de girasol y 500 toneladas de subproductos de girasol.
El martes 2 de julio dejó una imagen clara del impacto negativo que ha tenido en el sector agroindustrial el reciente aumento de las retenciones dispuesto por el Gobierno nacional. Según el registro oficial de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE), no se registraron nuevas exportaciones de maíz, soja, trigo, sorgo ni cebada.
Solo se anotaron volúmenes marginales en productos industriales, como 3.150 toneladas de aceite de soja, 103 toneladas de girasol, 160 toneladas de aceite de girasol y 500 toneladas de subproductos de girasol. Esta fuerte retracción en los registros resalta una tendencia de parálisis comercial en un sector clave de la economía argentina.
La caída en las exportaciones se produce en el marco de un contexto de creciente malestar entre los productores agropecuarios debido a las modificaciones impositivas. El aumento de las retenciones generó preocupaciones en toda la cadena agroindustrial. Distintas entidades del sector alertan que el nuevo esquema de retenciones erosiona la rentabilidad, desincentiva la comercialización y pone en riesgo la sostenibilidad de las exportaciones.
Medidas gubernamentales y la reacción del sector agroindustrial
El Gobierno nacional tomó la decisión de extender la rebaja temporaria de las retenciones para el trigo y la cebada hasta el 31 de marzo de 2026. Sin embargo, esta medida no incluyó a los demás cultivos, por lo que las alícuotas volvieron a los porcentajes previos al 27 de enero, cuando se había dispuesto la baja temporal. La retención a la soja pasó del 26% al 33%, la del maíz y el sorgo subió del 9,5% al 12%, y la del girasol pasó del 5,5% al 7%.
Esta modificación en el régimen de retenciones ha sido percibida como un fuerte golpe para el sector, que ya había experimentado un notable volumen de declaraciones acumuladas. Desde el 27 de enero hasta el 30 de junio, las exportaciones registraron más de 45 millones de toneladas en productos agroindustriales, un volumen que evidencia la importancia de estos cultivos para la economía del país.
Impacto en el complejo sojero y los productos de mayor volumen
A pesar de las dificultades generadas por el nuevo esquema de retenciones, el complejo sojero sigue liderando el ranking de productos exportados. Desde fines de enero, se han declarado 16,9 millones de toneladas de subproductos (como pellets y harinas proteicas), 7,16 millones de toneladas de poroto, y casi 4 millones de toneladas de aceite de soja. Solo en la jornada del pasado viernes se anotaron más de 1,1 millones de toneladas de subproductos, 600 mil toneladas de poroto y 126 mil toneladas de aceite de soja.
Por su parte, el maíz se consolida como el cultivo con mayor volumen declarado, con un total de 19,7 millones de toneladas desde el 27 de enero. De este total, más de 1,8 millones de toneladas fueron registradas solo en el último día informado. Este dato demuestra la importancia que sigue teniendo el maíz en el panorama exportador, a pesar de la incertidumbre que genera el entorno económico actual.
A pesar de la desaceleración en las exportaciones, los últimos 15 días de junio habrían dejado un ingreso aproximado de US$ 5.600 millones. Este volumen de divisas es clave para el mantenimiento de la balanza comercial y el financiamiento de la deuda externa del país. Sin embargo, el sector agroindustrial sigue preocupado por los efectos de la política impositiva y las posibles consecuencias a largo plazo en la competitividad internacional de los productos argentinos. (Con información de Clarín)